09 Abr Eurolat toma el pulso a los nuevos tiempos con la sombra de Venezuela
En cuestión de dos años el panorama mundial ha cambiado de forma radical. Para la Unión Europea Washington ya no es una fuente de estabilidad, sino al contrario, un continuo dolor de cabeza. En estos tiempos la UE y América Latina se reconocen mutuamente como socios naturales. EuroLat se ha reunido en Panamá con la sombra de la crisis venezolana presente en todas las reuniones.
La Asamblea de EuroLat (75 eurodiputados y 75 representantes de los parlamentos de Latinoamérica y el Caribe) se han reunido desde el pasado martes en Panamá para tratar todo un abanico de temas que van desde el comercio hasta la dramática situación que se vive en Venezuela.
Precisamente Panamá está en el foco de atención después de imponer sanciones duras contra el propio Nicolás Maduro y su círculo más cercano, reforzando el control financiero sobre él y otras 54 personas, algo que ha hecho que Venezuela responda con represalias. Las sanciones panameñas se incluyeron bajo el título de “personas provenientes de la República Bolivariana de Venezuela consideradas de alto riesgo en materia de Blanqueo de Capitales, Financiamiento del Terrorismo y Financiamiento de la Proliferación de Armas de Destrucción masivas”.
Con este contexto era imposible que el asunto venezolano no entrara en las reuniones de las comisiones permanentes de la Asamblea EuroLat. Beatriz Becerra, vicepresidenta de la subcomisión de Derechos Humanos del Parlamento Europeo y presidenta de la comisión de Asuntos Políticos Eurolat destacó en conversación con Aquí Europa “el hecho de que esta reunión esté teniendo lugar en Panamá justo cuando este país ha marcado una posición tan clara respecto a Venezuela”.
La eurodiputada española de ALDE, la voz más crítica en la Eurocámara contra lo que está ocurriendo en Venezuela, ha asegurado que “ya no está sujeta a debate la emergencia humanitaria entre la frontera venezolana y colombiana”, algo que supone “una crisis humanitaria sin precedentes”. “La amenaza es cierta para toda la región, y eso está vertebrando todos los temas sobre los que podemos hablar”, asegura Becerra, en referencia a los distintos debates que se están celebrando en la Asamblea EuroLat.
“No hay ninguna otra prioridad por encima de Venezuela” insiste con seriedad Becerra. “Lo afecta todo, no hay nada parecido”, apunta la eurodiputada, que alerta sobre la situación que se vive en la frontera con Colombia y que está llevando a las familias “sin comida, sin medicamentos y sin un lugar al que volver” a una situación insostenible.
“La crisis venezolana no es solo una crisis democrática, sino que es una crisis humanitaria de un altísimo nivel”, explicó Ramón Jáuregui, eurodiputado español de los Socialdemócratas y copresidente de EuroLat. “Casi 4 millones de venezolanos han huido del país, yo no sé como Maduro puede explicar esto”, apuntilló.
Otros temas en agenda
Pero la Asamblea EuroLat le tenía que tomar el pulso también a muchos otros asuntos que están teniendo lugar en un mundo cambiante, especialmente desde la victoria de Donald Trump en Estados Unidos. Por eso los representantes han hablado sobre comercio en el contexto de una guerra comercial entre China y EE.UU, pero también de lo que significan estos cambios en el desarrollo de las democracias, los derechos y libertades individuales y el funcionamiento del multilateralismo.
La agenda de EuroLat entra mucho más al detalle sobre elementos concretos como es el funcionamiento de la justicia en la región. Solo unos minutos después de finalizar la conversación con Aquí Europa la comisión presidida por Becerra votaba a favor de un informe con el que se intenta impulsar la elección de fiscales generales de forma transparente. “Este informe llega en un momento crucial, porque además se una a la reciente declaración de Naciones Unidas sobre la importancia de la independencia judicial en Honduras o El Salvador, que siguen siendo los lugares más inestables de la región”, explica la eurodiputada española.
“La lucha contra la impunidad en América Latina es lo que realmente transforma la sociedad”, asegura Becerra, que insiste en la necesidad de “apelar” a la sociedad civil y de asegurar procedimientos democráticos transparentes.