16 Dic Becerra (UPYD) reclama protección para los niños nacidos de maternidad subrogada
La eurodiputada de UPYD Beatriz Becerra reclamó hoy la protección en toda la Unión Europea de los niños nacidos de maternidad y paternidad subrogada, al tiempo que recordó que en 2014 el Tribunal Europeo de Derechos Humanos sentenció que el bien del niño debe priorizarse por encima de todo.
El desarrollo de las técnicas de fecundación permite que en la actualidad un donante de esperma y otro de óvulos puedan tener un hijo a través de un tercero. La gestación subrogada hace posible, de este modo, que las parejas puedan acceder a la paternidad con la ayuda, comercial o altruista, de una mujer que permite la gestación en su vientre.
Durante su intervención ante el pleno, Becerra criticó la enmienda introducida por el Partido Popular en el informe sobre los derechos humanos en la UE en el párrafo 114 , en la que “de forma extemporánea e injustificable, se condena la gestación subrogada, y además se la compara prácticamente con la prostitución o hasta el tráfico de órganos”.
“La gestación subrogada es una forma de fecundación in vitro, que permite a muchos ciudadanos acceder a la paternidad cuando no pueden hacerlo por otra vía”, recalcó.
En este sentido, apuntó que esta práctica es legal en unos países y en otros no. “Dentro de Europa hay una discriminación de facto. En algunos países se permite de forma altruista, mientras en otros sus ciudadanos se ven obligados a viajar al extranjero”, explicó.
Por este motivo, recalcó que es obligación de la UE “proteger los derechos de nuestros ciudadanos, con especial atención a la de los niños”. “La coherencia política que nos compete implica, como estableció el Tribunal Europeo de Derechos Humanos que los niños nacidos por gestación subrogada eran reconocidos y registrados legalmente y no sean objeto de discriminación por razón de nacimiento, como establece la Declaración Universal de DDHH en su articulo 2”.
Por ello reclamó armonizar los marcos legales de nuestros Estados para proteger los derechos de sus ciudadanos, los niños siempre en primer lugar.
En la mayoría de países de la UE la gestación subrogada está prohibida legalmente. Es el caso de Francia, Alemania, España, Suiza e Italia. En otros no está regulado y tan sólo en Reino Unido, Chipre y Grecia se permite aunque de manera altruista o por una pequeña compensación.
En el caso de Grecia, que lo permite siempre y cuando no haya ánimo de lucro a la vez que excluye a las parejas homosexuales, la justicia ha permitido recientemente que dos parejas españolas recurran a la gestación subrogada. La justicia debe avalar cada caso y hasta esta sentencia únicamente estaba permitido para los ciudadanos griegos o los residentes permanentes.
Este mismo año, la justicia italiana ha dictaminado que si la gestación subrogada se realiza en un país extranjero de un modo acorde a su legislación, se hace lícita la inscripción en el registro por sus padres biológicos.
Lo mismo sucede en España desde la circular, aprobada en 2010, que reconoce la paternidad a aquellos ciudadanos que tuvieron un hijo por esta vía en un país extranjero. La Ley 14/2006, de 26 de mayo, sobre técnicas de reproducción humana asistida (LTRHA), considera nulo de pleno derecho cualquier contrato que suponga la renuncia por parte de una mujer a la filiación materna. Es decir, en la actualidad se reconoce cuando se realiza en el extranjero pero se prohíbe en España.
Ante este marco, la mayoría de parejas europea optan por viajar a países como Estados Unidos, donde la maternidad subrogada es una actividad libre y consentida entre adultos, u otros como Rusia, Georgia, Kazajistán y, especialmente, Ucrania y México. En este último sí está permitido para parejas homosexuales.