27 Jul Los eurodiputados de UPyD piden a Israel que respete los derechos humanos
Los diputados de Unión Progreso y Democracia (UPyD) en el Parlamento Europeo han suscrito la carta promovida por un grupo de europarlamentarios dirigida a los responsables europeos en la que piden a Israel el respeto a los derechos humanos y el cese de todas las acciones que amenazan la pervivencia en paz de Palestina e Israel.
La misiva, remitida al presidente de la Eurocámara, Martin Schulz; el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso y a la Alta Representante de Política Exterior de la UE, Catherine Ashton, resalta que ante el desastre humanitario en Gaza, la UE no puede permanecer inactiva y tiene que exigir el cumplimiento de su propia legislación como se indica en el artículo 2 del Acuerdo de Asociación UE-Israel.
Para ello, los también miembros del grupo parlamentario Alianza de Liberales y Demócratas Europeos (ALDE) Francisco Sosa Wagner, Maite Pagazaurtundúa, Fernando Maura y Beatriz Becerra subrayan que se «necesita un alto el fuego inmediato que ponga fin a la matanza y al sufrimiento de la población civil, muchos de ellos niños«, que permita el acceso inmediato a Gaza de ayuda humanitaria, «sobre todo para satisfacer las necesidades médicas urgentes».
En la carta, los miembros del Parlamento Europeo piden tomar medidas para que Israel respete los «derechos humanos internacionales y el derecho humanitario» según lo estipulado por el artículo 2 del Acuerdo de Asociación UE-Israel. Asimismo, exigen «que Israel ponga fin a todas las acciones que amenazan la solución de dos estados».
En este sentido, recuerdan las conclusiones del Consejo de la UE sobre el Proceso de Paz de Oriente Medio, del 22 de julio de 2014, en las que piden la inmediata y sostenida apertura incondicional de los pasos fronterizos para el flujo de la ayuda humanitaria, mercancías y personas hacia y desde la Franja de Gaza, en consonancia con la Resolución de Naciones Unidas de 2009.
Recientemente, el Consejo también reiteró que la única manera de resolver el conflicto es a través de un acuerdo que ponga fin a la ocupación que comenzó en 1967, y que «la preservación de la viabilidad de una solución de dos estados» debe seguir siendo una prioridad.
Asimismo, la UE ha solicitado a Israel que detenga los asentamientos, incluidos en Jerusalén oriental, sobre todo en áreas como Har Homa, Givat Hamatos y E1, que ponga fin a la violencia de los colonos; al empeoramiento de las condiciones de vida de los palestinos en la zona C y las demoliciones – incluyendo de proyectos financiados por la UE – desalojos y traslados forzosos.