Becerra (UPyD): «El suicidio no es un asunto privado, sino de salud pública y todas las administraciones tienen responsabilidad»

10 Sep Becerra (UPyD): «El suicidio no es un asunto privado, sino de salud pública y todas las administraciones tienen responsabilidad»

La eurodiputada de UPyD Beatriz Becerra subrayó hoy, coincidiendo con el Día Mundial de Prevención del Suicidio, que el suicidio no es un asunto privado, sino una cuestión de salud pública en la que todas las administraciones tienen responsabilidad para luchar por reducir este fenómeno que suma 62.000 muertes al año en los 28 Estados miembros. Beatriz BecerraDurante una mesa redonda celebrada en el Parlamento Europeo, en la que asistieron expertos en salud mental y tratamiento de adolescentes, Becerra recalcó que los Estados miembros y las instituciones europeas tienen la obligación de actuar, a través de fondos y acciones, contra una lacra silenciosa que se cobra al año más muertes que los accidentes de tráfico. Paradójicamente, los países gastan ingentes recursos en reducir los accidentes en carretera, mientras que practican el silencio sobre el suicidio, que se cobra una vida cada 40 segundos. «No es un virus que no conocemos, sabemos que hay recursos y cosas que podemos hacer para luchar a favor del bienestar mental», manifestó.

En este sentido, la también autora de la novela sobre suicidio en niños y adolescentes «La estirpe de los niños infelices», llamó la atención sobre este fenómeno, que obliga a renunciar al mito de la felicidad infantil, es decir, que los niños deben ser felices por el mero hecho de serlo. Una vez llegados a este punto es preciso valorar que el sufrimiento en el niño «es de una intensidad que no tiene igual porque ellos no tienen capacidad de imaginar escenarios distintos, donde haya desaparecido la angustia o la desesperación».
Martine de Clerk
Asimismo, Becerra recalcó que el estudio del suicidio infantil y juvenil pone de relieve que el nexo común no es la enfermedad mental, la penuria o el maltrato, que coadyuvan a estas situaciones, sino el no sentirse bien, una sensación subjetiva de sufrimiento. Además, la invisibilidad que afecta a estos temas en la sociedad cubre con un manto de sufrimiento adicional a las víctimas y sus familias, que llegan a la conclusión de que esa situación sólo les pasa a ellas. «Cargar con ese peso es un daño adicional», indicó.

Por su parte, Martine de Clerck, directora de la Red europea de casas para adolescentes Action for Teens y coordinadora del proyecto ADOCARE financiado por la Comisión Europea, destacó que el 20% de la población europea sufre uno o más trastornos psicológicos, según la Organización Mundial de la Salud y en Europa el suicidio es la segunda causa de muerte entre jóvenes. «La responsabilidad de los Estados miembros es inmensa porque los fondos tienen que estar definidos porque son una herramienta fundamental que se ve en el terreno y que tiene efectos directos», manifestó.

Las organizaciones que trabajan con jóvenes –continuó– intentan dar una respuesta positiva a estos colectivos que no ven una salida para sus vidas. «Darles una visión positiva de quiénes son, estar abiertos a que se les ayude es la solución y por ello esa ayuda debe ser lo más visible posible», agregó De Clerck.
Marian Harkin
Asimismo, la eurodiputada irlandesa del grupo ALDE, Marian Harkin, insistió en la necesidad de que cada Estado miembro desarrolle planes específicos de prevención del suicidio, puesto que existen diferencias notables entre países, donde estas situaciones afectan de modo diverso a colectivos como mujeres, desempleados, jóvenes, parados, etc… «Es un problema mundial, pero hay variaciones por países, por regiones e incluso por comunidades», dijo Harkin, quien además deseó que el futuro comisario europeo de Sanidad, el lituano Vytenis Andriukaitis trabaje en el futuro sobre esta cuestión.

Por todo ello, Becerra reclamó la adjudicación de fondos europeos para la financiación de planes nacionales de prevención del suicidio en el marco de la acción conjunta de Salud Mental y Bienestar (2013-2016), así como el uso efectivo de los mismos por parte de los Estados.

La eurodiputada de la formación magenta recalcó que es absolutamente esencial el compromiso de los medios de comunicación en esta tarea preventiva. A su juicio, el mito del «efecto contagio» está más que desterrado pues incluso la OMS da indicaciones claras acerca de cómo informar adecuada y sistemáticamente sobre el fenómeno del suicidio, aunque la mayoría de los medios de comunicación españoles se obstinan en perpetuar esa falsa creencia de que «no hay que hablar de ello para no propiciar que haya más».

«La invisibilidad y el silencio solo logran incrementar la carga de dolor, soledad e incomprensión de las personas afectadas, y permiten a los poderes públicos mirar hacia otro lado al negar su mera existencia», planteó la eurodiputada.

En su respuesta a la pregunta que formuló Becerra con motivo de esta cuestión, la Comisión aseguró que es papel «apoyar la actuación de los Estados Miembros». «La prevención del suicidio es un tema que el Grupo de Expertos Gubernamentales en Salud Mental y Bienestar incluye regularmente en su orden del día. La acción conjunta de la Unión Europea en materia de salud mental y bienestar, que se puso en marcha en 2013 para elaborar un marco común de actuación en este ámbito, aborda la prevención del suicidio a través de uno de sus paquetes de trabajo bajo la dirección de Hungría.», expecifica. Se espera que antes de finalizar el año esté listo un primer informe en el que se analice la situación en los países participantes.

Además, especifica que «la Comisión financió un estudio (…) en el que se describían los sistemas de salud mental de los Estados miembros, prestando especial atención (…) en lo que se refiere a la prevención del suicidio».

Pregunta a la Comisión

Pregunta al Consejo

Respuesta de la Comisión